La asamblea de la reformulación

AHZ - 10 octubre 2011

Tras una semana sin fútbol en la que la actualidad rojiblancase ha centrado en analizar el estado económico-financiero del Athletic, llegahoy, por fin, la Asamblea General Ordinaria en la que los socios compromisariosdilucidarán si la reformulación de cuentas que la Junta entrante propone escorrecta o no.


Existe cierta incertidumbre por conocer si en el trascursode la Asamblea quedará patente el enfrentamiento entre ambas directivas,entrante y saliente, o si tras las numerosas reuniones mantenidas, a pesar delas discrepancias, las aguas no rebasarán los cauces de la lógica.

Subyace en el debate un notorio interés por parte de ambasdirectivas. De la que encabezó García Macua por ver emborronado de un plumazoel perfil de gestor que él mismo procuró labrarse y que los medios locales,mayoritariamente, extendieron sin ningún rigor. De la entrante, por lanecesidad de procurar que el mayor porcentaje de ingreso posible puedarepercutirse en sus cuatro años de ejercicio y no en el de los salientes.

Así, tras el debate de las últimas semanas, rueda de prensade Macua incluida, todo hace prever que las cuentas serán reformuladas, que la formaen la que la Junta actual ha propuesto la votación procurará no dejar demasiadoen evidencia a los anteriores mandatarios y que, salga Zarate o no a la tribunade oradores, no se producirán grandes enfrentamientos.

La reformulación de las cuentas parece, además, razonable,al margen del interés de Urrutia y sus compañeros de aventura. Desde ciertosmedios, de forma interesada en algunos e irresponsable y desinformada en otros,se ha intentado desvirtuar el debate, desenfocarlo. Confundir. El nudo gordiano, el de losSocios Barria, es una discusión que no aguanta un asalto. Basta con leer elartículo 14 de los Estatutos -que gusten o no son las normas que rigen el Club-para comprobar que esas personas no son socios y mucho menos de pleno derecho.

Por tanto, esos casi 7 millones de euros no puedencomputarse como ingresos del ejercicio finalizado se pongan Macua y Zarate como se pongan, o esgrimanlos informes que deseen del Sr. Oleaga o de los profesores de la UPV. Informes,por cierto, redactados en septiembre de 2011, cuando las cuentas estánpreparadas desde julio. Hubiesen parecido más objetivos si su redacción fueseprevia al cierre del periodo,  momento en el que debió surgir la necesidad de consultar a expertos.

Del resto de conceptos que separan a ambas juntas, imputardos millones al ejercicio finalizado parece fuera de lugar cuando tres cuartaspartes del mismo está ligado a la consecución de objetivos deportivos a partirde 2012; provisionar dinero por la más que probable posibilidad de no cobrarlos 2,5 millones de euros que aún adeuda el Mallorca es obligado; y necesario quese deje de traspasar dinero desde la Fundación al Club de manera arbitraria ysiempre en función de la cantidad necesaria para cuadrar la partida deingresos.

El quid de la cuestión debiera estar, y se echó de menos laexplicación en la comparecencia al alimón de Macua y Zarate, en conocer cómo esposible que se desviase en 9 millones de euros el gasto de la última campaña.Ahí no desear entrar ni la junta saliente, ni los medios que están defendiendo,con muy poco rigor por cierto, su gestión.

De todo ello, y al margen de la prima por la clasificacióneuropea, sorprenden en ese desfase  los seis millones deeuros más que ha costado el personal deportivo. De las explicaciones dadas porUribe-Echevarría y Aldazabal a los compromisarios en el Palacio de Ibaigane, nose han percibido grandes luces y se ha podido apreciar alguna que otra sombra. Cuestacreer que Zarate, un hombre riguroso a la hora de manejar el detalle del más insignificanteconcepto presupuestario, se equivocase a la hora de prever para la campaña 2010-2011 el coste de laprincipal partida de gasto en seis millones de euros.

Es más, cuesta entender que para la temporada 2010-2011 sepreviese un coste de personal deportivo inferior al de 2009-2010. ¿A qué sedebió? ¿Pensaba la junta rebajar el coste de la plantilla? ¿Reducir, acaso, elnúmero de futbolistas? ¿Confiaba en traspasar a alguno de los que máscobran?

En definitiva, parece razonable dejar las cuentas segúnUrrutia propone. No tiene trascendencia a nivel de avales, y no hará necesariobucear más en los números de Macua, que posibilitarían que aparezcan operacionessorprendentes y que sólo avivarían unenfrentamiento social que sobra en el Athletic. Se debe pasar página a esteasunto cuanto antes.

Eso sí. Cabe recordar ahora que la gestión económica de Macua, que se salda con un ligero superavit durante sus cuatro años de mandato, se sustenta en el traspaso de Aduriz y en la plusvalía obtenida por la permuta de los terrenos de San Mamés por acciones de la sociedad San Mamés Barria. Mientras, la deuda a corto y largo plazo se ha incrementado. Eso es lo que ha dado de sí la brillante gestión de aquel que presentaba como aval para la reelección una administración modélica.

1 comentarios:
Anonymous dijo...
10 de octubre de 2011, 17:36  

Quiero recordar también en la brillante "gestión" de Macua, las maravillosas subidas de cuotas "no penalizadoras para el socio" de en torno a un 40% en cuatro años.

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